De la mano del chef Pablo Rojas, Brüder sí que sabe de comida alemana. Tablas, sándwiches y cocina tradicional de ese lado del mundo logran que los comensales se vayan con la guatita llena, muy llena, y el corazón contento, bien contento. Y como dentro de la gastronomía alemana es inevitable no pensar en embutidos, nos fuimos directo a probar la tabla Brüder que demuestra claramente por qué los germanos son tan famosos por ellos. Weissburst y Gorda Alemana se acompañan de repollo morado, puré de manzana y chucrut casero y cebolla caramelizada para lograr juntos un juego de sabores que hacen de esta tabla un tentempié ideal para comenzar, idealmente acompañado.
También a modo de «entrada», aunque su tamaño equivale fácilmente a un plato «de fondo», aparece el Tártaro. 250 gramos de puro sabor y placer que, como es tradición, se come con pequeñas tostaditas y se complementa con pepinillos y cebolla entre otros. Un clásico que siempre es bienvenido. Tanto para el Tártaro como para la tabla Brüder pidan mostaza de grano, porque hará que toda esta experiencia culinaria los deje hablando en alemán…¡literal!
Y pasando a los sándwiches, tuvimos la posibilidad de probar dos de ellos. La Mechada Essen con aros de cebolla, mayo, tomate, tocino y pepinillos que llega a ser casi tan alta como tu moral. Rica, bien rica. No por nada la mechada es una de las estrellas de Brüder. Y si te vas a comer una mechada, ya sea tradicional o especial, te sugerimos o más bien te exigimos que sea en marraqueta, si no, no vale. También tuvimos la dicha de probar un clásico; una hamburguesa Chemilico con huevito frito y cebolla caramelizada. Bastante más bajita que la Mechada Essen pero de potente sabor.
Todos los sándwiches, hamburguesas, mechadas, churrascos, lomos, aves y gordas vienen acompañados de papitas chips muy bien logradas. Además puedes pedirlos en pan marraqueta, frica o molde y darles aún más sabor con una mayo casera, de pepino o de ajo.
Y como también es tradición dentro de la colonia alemana, en Brüder tienen gran variedad de cervezas artesanales e importadas para que marides como corresponde tu comida en la que también destacan ricos platos de cocina tradicional alemana, ensaladas y postres. Y para que tu experiencia sea familiar, hay menú para niños.
Así que ya saben, si quieren comer rico, abundante y en un ambiente muy acogedor, tienen que ir a Brüder y deleitarse con las maravillas que la gastronomía alemana trae a este último rincón del mundo.
¿Dónde?: Avenida Tabancura 1258, Vitacura.