El equipo chileno, compuesto por el candidato Mauricio Núñez y su ayudante Manuel Bustos, el coach Francisco Layera y su presidente Sebastián Salas, quien además se desempeña como uno de los jurados del certamen, viajó hasta Lyon para ser parte del seleccionado grupo de 24 países que ganaron un cupo dentro del Bocuse d’Or.
Iniciado en 1987 por Paul Bocuse, el concurso se ha convertido en un fantástico trampolín para los cocineros, promoviendo además las costumbres y sabores de cada uno de los países, ya que ésta es la vitrina con mayor exposición del mundo gastronómico.
El primer desafío para el equipo nacional fue lograr un cupo en la semifinal americana que se llevó a cabo en México el pasado mes de abril, en una competencia junto a otros 10 países del continente. Gracias a la dedicación y esfuerzo que este equipo respaldado por Achiga, logró quedar dentro de los 5 países seleccionados para llegar a la gran final en Lyon, Francia.
“Podemos decir que es un orgullo contar con una selección de chefs tan aplicados, con tanta capacidad y tan preparados para competir en el campeonato mundial de gastronomía, que por el sólo hecho de estar involucrado en dicho certamen, da a Chile, un sitial universal, prestigiando nuestra comida y por supuesto nuestro país”, señala Guillermo Prieto, presidente de Achiga.
Fue así como durante el pasado 29 y 30 de enero, el Bocuse d’Or reunió equipos de todos los continentes durante dos días de intensa competencia. Después de más de cinco horas de largas pruebas, seguidas de una ceremonia de premios muy emotiva, Dinamarca ganó el oro por segunda vez en la historia del torneo, el tan codiciado título de Chef y la gastronomía de todo un país. El premio de plata fue entregado a Suecia y el tercer lugar de bronce a Noruega.
A pesar de no estar dentro de los primeros de la lista, Chile mostró un importante desempeño durante el largo camino que significó llegar hasta Francia y por ello esperan seguir trabajando para mantener el nombre de nuestro país dentro de los más destacados del mundo como lo ha conseguido hasta ahora.
“Esta fue una gran vitrina y una oportunidad muy grande para Chile, ya que estuvimos presente en una competencia de categoría internacional, es una de las más importantes de la industria alimentaria de todo el mundo. Esto incide directamente en poder dar a conocer los productos que Chile exporta y también en el turismo. Son ámbitos en el que nuestro país es observado y con nuestra participación, pudimos mostrar que nuestro país, a pesar de estar lejos, también estamos dedicados al trabajo profesional en la gastronomía y tenemos mucho más que ofrecer”, recalca, Sebastián Salas, presidente de la Selección Chilena de Gastronomía.
Para futuras participaciones, el equipo espera tener más apoyo de auspiciadores y contar con especialistas en todos los ámbitos que se necesita para así tener un mejor desempeño. La idea es profesionalizar esta tarea y que, de esta forma, los participantes puedan contar con el tiempo y un estándar de entrenamiento que les permita destacar cada vez más en un torneo de esta categoría.
Platos presentados por Chile
Principal:
Chartreuse de coliflor y pastis, relleno de espinacas y crema cuajada de verduras, choritos y almejas con pan de especias.
Tartar de ostiones y semillas de cilantro.
Emulsión de cilantro, ciboulette, albahaca y ostras.
Jalea de frutas y lima con pepinos y cochayuyo frito.
Croqueta de verduras, tomillo y camembert.
Ensalada de brotes con papas crocantes y hierbas.
Plaqué:
Rack de ternera rellena de mollejas, foie y pistachos, envuelto en tocino, acompañado de jugo de ternera y uvas tintas, emulsión de hierbas aromáticas y foie.
Croqueta de mollejas y rábano picante.
Puré de papas y queso.
Betarragas navegado con cardamomo y encurtidos.
Puré de zanahorias con pan de especias y ajo negro.