A principios del mes de marzo arribó a nuestro país La Picantería -sí, el mismo que se encuentra en el distrito de Surquillo en la ciudad de Lima- de la mano del popular chef peruano Héctor Solís. Este comedor familiar se instaló con lo mejor de la cocina norteña peruana y pescados locales en CV Galería, un nuevo espacio en Alonso de Córdova que alberga arte, cultura y gastronomía.
Esta es la primera experiencia del chef fuera de su país y tras un año y medio de trabajo consiguió abrir el esperado local. ¿La premisa? Que el pescado se aproveche de ton a son, sin desperdiciar nada. La mayoría de la materia prima viene del norte de nuestro país y se exhiben recién llegados, frescos y radiantes en una vitrina que está justo al ingresar a La Picantería.
Aquí, el pescado se vende entero y se cobra por kilo y de él pueden salir hasta cuatro preparaciones diferentes dependiendo del tipo y del peso que este tenga. Por ejemplo; se puede elegir una Corvina a $36.000 por kilo y obtener un Cebiche Nipón, un plato Al Ajo o un Guiso Sudado. Tres preparaciones enjundiosas y perfectas para compartir por el precio de un solo pescado.
También hay platos ya preparados que en carta son los Iconos. Pasen a probar de todas maneras el Cebiche Caliente de Merluza Austral ($14.000) que es algo totalmente diferente a lo que estamos acostumbrados. Es un plato cocinado al vapor que provoca que el pescado quede suave, casi esponjoso en boca, totalmente apetecible. La merluza es bañada por una salsa a base de Leche de Tigre y ajíes que termina por levantar todos sus sabores.
La elección del día fue el Robalo ($40.000), de suave sabor y carne tierna, que lo prepararon en primer lugar en un Cebiche Picantero con el pescado cortado en dados grandecitos para saborearlo bien, ajíes y Leche de Tigre, potente, con carácter, acompañado de camote para entregar una cuota de dulzor.
Lo siguiente, fue la preparación estrella. Un Róbalo Al Ajo realmente imperdible. Con láminas de este condimento y mucha, pero mucha mantequilla. Una preparación cremosa, con un pescado que se presenta hermoso y entrega todo su sabor, emplatado de cabeza a cola -quizás un poco desconcertante para quienes no están acostumbrados- en el que se puede apreciar todo su potencial. Sellado y grillado, acompañado de papas. Delicioso.
Y con la cabeza, el espinazo y la cola se preparó un enjundioso Caldo que, con un poquito de picor, vino a entregar un sello perfecto a la velada. Un caldo para cucharear entusiasmado y probar en cada sorbo todo el sabor de la cocina de Héctor Solis.
Y para los dulceros, puedo recomendar Volador ($3.900) un tradicional y antiguo postre peruano. Una especie de alfajor de masas horneadas con azúcar flor y manjar blanco. Crocante, ideal para cualquier cierre culinario.
Sin duda La Picantería es una de las grandes aperturas de este 2019 que comienza. Con pesca fresca de las manos de pescadores artesanales de las costas del norte de nuestro país, específicamente de los sectores de Punta de Choros y Caleta de Hornos, este nuevo proyecto del chef Solís -que se suma a Fiesta y La (otra) Picantería, ambos en Perú- nos espera para sorprender con sus preparaciones diferentes y llenas de sabor en un local que en el diseño le hace guiños a una caleta.
¿Dónde? Alonso de Córdova 4355, Vitacura.